Ya hemos llegado al cuarto domingo de Adviento. En este tiempo nos preparamos para la Navidad. Y yo me preguntaba, hoy en nuestras casas y nuestro entorno, ¿Qué es la Navidad? Preguntando a mis hijas me responden: vacaciones, Olentzero, comer y cenar en familia, celebrar en familia, adornar la casa, … Esto me lleva a reflexionar, si yo me preparo de manera adecuada para la Navidad, para la venida de Jesús, para hacerle un huequito en nuestro hogar, y en nuestra vida.

Por si no soy capaz por mí misma, la otra pista de este evangelio, me da tranquilidad. Como le ocurrió a José, sé que Dios está conmigo, animándome y empujándome a ser seguidora de Jesús, desde el ejemplo y el compromiso.
Escribir estas líneas me ayudado a darme cuenta de que no estaba viviendo el adviento “con sentido”, y que estoy a tiempo de hacerlo. Espero que leerlas también os ayude a vosotros. ¡Feliz Navidad!
A.A.