miércoles, 25 de diciembre de 2013

LA LUZ BRILLA EN LA TINIEBLA (Jn 1,1-18)

La existencia de oscuras tinieblas en el fondo es lo que hace aumentar el brillo de la luz. Luz y tinieblas conviven en unidad, de la misma manera que pueden coexistir debilidad y fortaleza. Todos hemos podido experimentar que cuando la Vida nos plantea situaciones difíciles ante las que nos sentimos débiles, también nos ofrece la posibilidad de sacar fuerzas de flaqueza para hacer frente a esas situaciones y, si aceptamos el reto, acabamos fortalecidos y más capaces de salir adelante en este mundo tenebroso. 

Estos días vemos la imagen de la debilidad en un niño que nació en Belén, nació necesitado de calor, alimento, afecto…, como todo ser humano. Este niño fue llamado “Dios con nosotros”, creció y comprendió quien era, lo era Todo y ya no necesitaba nada. Todos los días tenemos la oportunidad de darnos cuenta de quiénes somos y de sufrir menos en esta vida porque deseamos algo que nos falta, pero ¿realmente necesitamos eso que deseamos?

Hace unos 2000 años en Belén también había crisis, enfermedad, inmigración y otras penurias, sin embargo llegó la esperanza en forma de un niño que fue capaz de brillar con luz propia e iluminar sus alrededores. Esa luz fue transformadora en su entorno y ha seguido extendiéndose y llegado hasta nuestros días, de tal manera que hoy, día de Navidad, la luz renace. Por eso, aunque haya que crecer entre las tinieblas de una sociedad de consumo desmedido, apegos, incomprensión, violencia, prejuicios, intolerancia… , el Gozo de la Vida sigue reproduciéndose en cada persona.
 
EGUBERRI ZORIONTSUA eta URTE BERRI ON
FELIZ NAVIDAD Y FELIZ AÑO NUEVO

I.O.I

sábado, 21 de diciembre de 2013

TU DECIDES( Mt 1,18-24)

Resulta curioso, con que mimo nos presentan los Evangelios la concepción de JESÚS, en la persona de su madre MARÍA. Como adornan el cómo y el porqué, para ayudar a José en la decisión, que posteriormente tomará.  

Quisiera centrar el tema del comentario precisamente en el hecho de la toma de decisiones. Todos los días tomamos decisiones. Tomamos decisiones de forma inconsciente, decisiones que sólo nos afectan a nosotros, tomamos decisiones que afectan a nuestra familia, a veces tomamos decisiones influenciados por otros o por la sociedad o por el que dirán. En ocasiones tenemos la oportunidad de tomar decisiones que no sólo nos afectan a nosotros o a la gente que nos rodea, si no que sabemos que pueden ser algo más, un grano al menos, en algo que creemos. Es en ese tipo de decisiones donde los cristianos debemos ser valientes, debemos abstraernos del qué dirán, debemos tomar ejemplo, de los muchos que el Evangelio nos ofrece como muestrario, como ayuda ...

Así, es como yo entiendo la decisión que José tomó, al aceptar la venida de JESÚS, como algo que iba más allá del amor que él sentía por María, más allá de sus propias vidas, su decisión significaba aprobar, apoyar y aceptar lo que el SEÑOR, le pedía. 

También a nosotros, los cristianos, sabemos que el Señor nos pide respuestas, nos pide que seamos decididos, que apoyemos y nos apoyemos. Que aprobemos a los demás. Que como seguidores del ejemplo de Jesús debemos aceptar que el camino no es fácil, pero sí tan esperanzador que nos impulsé a obrar en consecuencia.

Desde aquí, mi más sincera enhorabuena para todos, por vuestra DECISIÓN.
 
ZORIONAK ETA URTE BERRI ON.
 
K.

domingo, 15 de diciembre de 2013

JESÚS, EL QUE HABIA DE VENIR (Mt 11, 2-11)

Al leer el evangelio de hoy a pesar de toparnos con una llamada de atención a lo que esperábamos sobre la venida de Jesús, me ha traído a la mente, con alegría y sobre todo con ESPERANZA, la imagen del Papa Francisco, su imagen alejándose de la ostentosidad del poder y acercándose a los pobres y débiles. Insistiendo desde su escrito la "Alegría del Evangelio" (entusiasta y afortunado nombre) a cooperar con el desarrollo y la educación, a luchar contra el poder del dinero y la dictadura de la economía. Fijándonos en él y en sus palabras se nos hará más fácil trabajar por los pobres, los preferidos del Señor, y concienciarnos a pesar de las actitudes y políticas egoístas que nos rodean y que con la disculpa de la crisis nos llevan a unas desigualdades vergonzosas e intentan disculpar medidas que limitan los derechos básicos de los más débiles y pobres.

En el evangelio de hoy la señal de que Jesús es verdaderamente "el que había de venir" es que lleva la buena noticia a los pobres y consuela y cura a los marginados, no son señales de trompetas, ropa ostentosa, poderío reconocido y mensajes fáciles de digerir, nos dice que nos confundimos si lo que esperábamos es un Jesús más formal y conformista que nos trae por arte de magia la paz, felicidad, abundancia y éxito sin ver las guerras, la infelicidad y la carencia que hay a nuestro alrededor, no debemos equivocarnos.

El camino del adviento nos lleva a Jesús, el mismo camino que nos lleva al Reino de los Cielos donde todos tienen cabida, donde los más pequeños se harán grandes, y en este camino debemos demostrar que somos una comunidad solidaria y que llevamos la "alegría del evangelio" a los caminantes que nos encontramos en el camino.

J.y M.

domingo, 8 de diciembre de 2013

¿ESTAMOS PREPARADOS PARA EL CAMBIO? (Mt 3,1-12)

“Convertíos porque está cerca el reino de los cielos”. Aquí tenemos la exhortación que nos hace Juan Bautista… Es un llamamiento a la conversión… Al cambio y la transformación interior… 

Por otro lado observemos su atuendo y su alimentación: “Juan llevaba un vestido de piel de camello, con una correa de cuero a la cintura, y se alimentaba de saltamontes y miel silvestre”.
 
Juan ya ha hecho la transformación interior, la hizo hace tiempo… Prescindió de las costumbres consumistas de su tiempo, y fue coherente de palabra y hecho… Había nacido para ello…
 
En el tiempo actual, vivir así nos resulta complicado… Los parados vivimos angustiados por lo que nos va a deparar mañana, y nuestra mirada a Jesús de Nazaret es apenas fugaz… Perdemos la confianza, y no recordamos aquellas sabias palabras, donde se nos anima diciendo que “Dios proveerá”, “alimenta a los pájaros…”, “viste a los lirios…” Y si las recordamos, nos cuesta creerlas.
 
Recientemente hemos observado que hay esperanza… La campaña de recogida del Banco de Alimentos, ha sido todo un éxito, y mis compañeros y amigos se han dejado la piel (y algo más) en ello, demostrándonos que la transformación es posible… Desde aquí les mando mi reconocimiento y admiración…
 
Como apenas ecos lejanos, suenan ya las tristes palabras de insolidaridad, que muchos domingos se vierten por la mañana, en una radio local, culpando al inmigrante de los males de nuestra ciudad… El huracán de solidaridad las borra… Tan solo son ya un mísero testimonio…
Estamos en Adviento, la Navidad se acerca, pero el reino de los cielos del que nos habla el Bautista, se vislumbra en los pequeños gestos de solidaridad, que multiplicados se convierten en un gesto grande… casi divino…
 
“Y no os hagáis ilusiones, pensando : “Abrahán es nuestro padre”, pues os digo que Dios es capaz de sacar hijos de Abrahán de estas piedras”. Reflexionando sobre esta otra parte del evangelio, me doy cuenta de que cuantas veces nos sentimos con más derechos, tan solo por el hecho de que somos de aquí… Negamos el pan y la sal al inmigrante, al diferente… Le culpamos injustamente de la delincuencia… Le acusamos de cobrar ayudas de forma fraudulenta… Sin apenas posar la mirada en los verdaderos culpables de la crisis… No nos damos cuenta, de que arrojando piedras contra nuestro hermano diferente, nos las arrojamos contra nosotros mismos… No nos damos cuenta de que ahora nos toca a nosotros o a nuestros hijos, salir a buscar el pan a países como Alemania, Suiza… Y que corremos el riesgo de ser tratados de la misma manera…
 
Escupimos al cielo ciegos de rencor y estupidez, y nuevamente somos cegados por la propia maldad, que por la simple gravedad nos viene de vuelta.

T.C.

domingo, 1 de diciembre de 2013

EXHORTACION A LA VIGILANCIA (Mt, 24, 37-44)

Dando vueltas acerca de éste, mi primer y espero que no último comentario acerca de la exhortación a la vigilancia del evangelio de San Mateo, me viene a la memoria una imagen más dulce:

La de aquellas madres, hoy ya abuelas, sentadas a la mesa, multiplicándose por tres para llegar a todos los rincones, interpretando y reaccionando a todos y cada uno de los gestos de los comensales.

Son las primeras en reponer el pan antes de que se acabe, las que rellenan la jarra de agua, haciendo que por arte de magia –la magia del amor-, la jarra nunca se vacíe de su contenido, son las que colocan un cubierto antes de que nadie lo extrañe, las que vuelven a ofrecer antes de que nadie pida repetir.

En definitiva, son las perfectas anfitrionas, las que vigilan constantemente, infatigables a nuestros ojos, siempre alerta.

Imagino que toda esa cantidad de trabajo, toda esa energía transmitida, todos esos desvelos mostrados, deben de tener sus compensaciones a la vez que generarán sensaciones entre los comensales. Se me ocurren unas pocas:

- La sensación de GRATITUD –hacer algo gratis por lo demás que es pagado con unas GRACIAS-
- La sensación de BIENESTAR –estar bien con uno mismo haciendo el bien a los demás-
- La sensación de PLENITUD –aunque se haya vaciado físicamente, se encuentra llena de satisfacción-
- La sensación de PAZ por el trabajo bien hecho.

Todos esos desvelos que producen tanta satisfacción personal nos muestran que el camino a seguir esta AHÍ:

No pasemos por la vida con la venda de la INDIFERENCIA en los ojos; con la mordaza del MIEDO en los labios; con los tapones del CONFORMISMO en los oídos, en definitiva, con la CONCIENCIA enterrada en lo más hondo de nuestro ser.

VEAMOS, ESUCHEMOS, HABLEMOS, ACTUEMOS 

Según los dictados de nuestra conciencia. Ello nos hará........

MAS LIBRES, MAS SOLIDARIOS, MAS DIGNOS, MAS PERSONAS, MAS PLENOS.

Una buena canción que resuma estas palabras, bien podría ser “un corazón de oro” de Neil Young (en inglés “a heart of gold”). Te propongo que la escuches.

 
Buena semana
 
A.

domingo, 24 de noviembre de 2013

GENTE IGNORANTE, SIN CORAZON (Lc 23,35-43)

En aquel tiempo, había muchos que se burlaban de Jesús. No le creían y lo desafiaban. Pedían pruebas de su fuerza, de su sabiduría. Sabían o no de sus hechos, de sus milagros.

Pero también Jesús pedía mucho: que los hombres se respetasen, que ayudasen unos a otros, que no matasen a sus semejantes. Cosas muy difíciles en aquella época. Gente ignorante, sin corazón. La vida poco valía.

Pero hoy, no todo es diferente. Probemos:

¿Cuántos hacen mal uso de la autoridad que tienen?
¿Cuántos se juzgan poderosos y pierden el valor del respecto?
¿Cuántos son malhechores juzgándose buenos?

Bien, quizás no solo en aquel tiempo había gente ignorante y sin corazón.

Vamos a pensar en las cosas que hacemos mal y no nos damos cuenta, aunque sea la falta de cordialidad en el tráfico, la falta de paciencia entre parejas, el descaro con lo que no nos pertenece, la falta de ética y principalmente la falta de respeto con el otro.

La vida de Jesús y todo su sufrimiento debe servirnos de ejemplo y de aprendizaje a todos nosotros. Cuando la vida nos muestra caminos difíciles, cuando nos sentimos perdidos, tristes, decepcionados, debemos tener en mente las injusticias que ha sufrido Jesús.

Es necesario que este tiempo sea un Nuevo Tiempo.
 
La confianza, la fraternidad y la paz sean estados de espíritu y objetivo en la vida.
J.C.

viernes, 22 de noviembre de 2013

COMO SI FUERA HOY MISMO (Lc 21, 5-19)

En este pasaje del evangelio Jesús nos habla de luchas de pueblo contra pueblo, de hermanos contra hermanos, terremotos, epidemias, hambre en el mundo. Esto mismo es lo que vemos y oimos cada día cuando escuchamos las noticias. Nos hablan de guerras en el mundo, de tifones, de niños que mueren por falta de algo tan cotidiano para nosotros como tener un cuarto de baño, de desnutrición infantil, hambrunas.....es nuestro día a día....pero tan lejano. Han pasado más de 2000 años y no hemos mejorado , seguimos cometiendo los mismo errores. 

Y ante todo esto qué hacemos, nos callamos, miramos a otro lado,....Jesús nos pide que demos nuestro testimonio, que no perdamos la ocasión , por dura que sea de explicar, de hablar, de comentar, de reflexionar de todo lo que pasa, cerca o lejos de nosotros. Tenemos algo muy importante, la palabra. No la callemos, utilicemos nuestra capacidad de dar testimonio y compartir reflexiones sobre la realidad de nuestro tiempo como Jesús nos pide.

El mismo nos dice , que en algunas ocasiones, no va ser fácil dar nuestro testimonio. Quizás ni los más cercanos nos entiendan, o les guste lo que decimos, quizás nos rechacen, se alejen de nosotros. Quizás prefieran seguir en la ignorancia porque es más fácil, o porque el mensaje de Jesús requiere mucho esfuerzo y compromiso.
Eso no nos debe hacer caer, detenernos o abandonar el camino. Debemos perseverar en el seguimiento del camino de Jesús, desde el respeto, desde la fé . Como se dice en el pasaje, Jesús nos da argumentos de sobra para evitar y no encontrar razón alguna para guerras ( de dinero, de poder, de...), para las desigualdades entre hermanos ( unos enfermos por comer demasiado y otros se mueren literalmente de hambre ), para defender condiciones dignas de vida con casa, hospitales, escuelas para toda la humanidad.

Nuestra perseverancia en el seguimiento del mensaje de Jesús hará que algún día alguien pueda decir: 

“Hoy no es como ayer, como hace más de 2000 años. Hoy es un día nuevo de paz e igualdad”
 
Y.U.A.

sábado, 9 de noviembre de 2013

NO ES DIOS DE MUERTOS, SI NO DE VIVOS (Lc 20, 27-38)

En este pasaje los saduceos plantean una situación que, aunque quizás algo cómica y con intención de ridiculizar a Jesús, deja traslucir muchos interrogantes y cuestiones que más de uno hemos tenido acerca de los misterios que no entendemos, sobre todo los que (como yo), posiblemente tenemos una mente más lógica...

En otros casos parecidos, Jesús se suele limitar a resaltar la intencionalidad de los comentarios que le hacen, pues muchas veces no tienen otra que intentar desacreditarle o ridicudizarle con malas artes. Esta vez, sin embargo, nos deja su respuesta sincera, ya que sabe que, como personas, estos cuestionamientos y la incertidumbre respecto al futuro es algo que todos, en mayor o menor medida, experimentamos y que nos crean inseguridad y, en ocasiones, desasosiego. En su respuesta vemos la actitud con la que podemos acercarnos a todos misterios, como la resurrección, o muchas cosas relacionadas con Dios.
Yo creo que la lógica, y el método científico son las mejores herramientas que tenemos para conocer el mundo en que vivimos y desde lo que somos ahora, con bastantes limitaciones que forman parte de nuestro ser persona: la necesidad que sentimos de compartir nuestra vida con las personas, de formar una familia, el dolor y la soledad cuando nos separamos...
Sin embargo, todo lo relativo a Dios, y lo que se sale de este mundo, no podemos comprenderlo, y tampoco podemos aplicar esas herramientas para estudiarlo...
Pero no es necesario....Jesús ha querido dejarnos claro que, a pesar de no comprenderlos, no hay ninguna duda de que nos llaman a la esperanza en una vida mejor, con menos limitaciones (incluidas las que hacen que nos planteemos estas cuestiones), sea como, donde y cuando sea, ya que “No es Dios de muertos, si no de vivos”
S.F.

domingo, 3 de noviembre de 2013

ZAQUEO, EL RECAUDADOR DE IMPUESTOS (Lc 19,1-10)

Desde niños hemos escuchado el evangelio de Zaqueo, hemos reflexionado sobre que nos quería decir Jesús en él,… además si nos metemos en google y buscamos comentarios de Zaqueo encontramos muchos resultados escritos por religiosos y laicos. Por todo esto, la pregunta que me hago es: ¿qué me dice a mi HOY el evangelio de Zaqueo?

Me viene a la cabeza un musical que vi la semana pasada con mis hijas, cuyo título era “Otro gran teatro del mundo”. La obra nos contaba que cada uno tenemos un personaje en el mundo que nos ha tocado, uno le ha tocado el rico, otro el pobre,… Y cada uno actuamos en este mundo siguiendo el guión que nos toca sin salirnos, sea justo o no. Entonces aparece el personaje de una niña que se llama Alma, que cambia el pensamiento de los actores del mundo. Así descubren que aunque les haya tocado un personaje en el mundo pueden cambiar su guión y así entre todos cambiar el mundo a un mundo mejor.

Y pensareis: ¿qué tiene que ver esto con Zaqueo? Yo creo que mucho. Era un publicano, jefe de recaudadores y muy rico, por esta razón era odiado, los recaudadores trabajaban para los romanos y además pedían más dinero del que los romanos exigían haciéndose de esta manera ricos fácilmente. A Zaqueo le toco ser recaudador de impuestos, y cumplía su papel sin cuestionar y además si podía se quedaba con dinero,… (a pesar de haber pasado casi 2000 años, hoy seguimos haciendo lo mismo). 

Pero apareció Jesús, y esta presencia da un vuelco en el corazón de Zaqueo y le hace cambiar. Creo que nosotros en el fondo somos como Zaqueo, estamos acomodados en nuestro personaje de este mundo y seguimos nuestro guión sin cuestionar. Jesús nos invita a cambiar, se aloja en nuestro corazón para darnos valor y fuerza para que no nos conformemos, para que quitemos la pereza, y hacernos ver que podemos improvisar y salirnos del guión de la vida sin importar lo que piensen los demás, así entre todos hacer un mundo mejor, construir el Reino de Dios.
 
A.A.

sábado, 26 de octubre de 2013

¿CUÁL ES MI ACTITUD? (Lc 18, 9-14)

A través de un fariseo y un publicano, Jesús en el evangelio de hoy nos muestra de una forma clara dos posturas diferentes y contrapuestas para dirigirnos a Dios y a los demás:
Orar desde las costumbres, cumpliendo todas las normas, seguros de hacerlo todo bien con aires de prepotencia y autosuficiencia y creyendo que los demás son inferiores. (El fariseo)
Orar con humildad, conociendo los fallos, pidiendo perdón desde la confianza y con la seguridad de que Dios escucha, quiere, acoge y perdona siempre. (El publicano)
La pregunta está clara: ¿Cuál es mi actitud? - ¿A quién me parezco?
Pero la respuesta no es tan fácil.
A veces, muchas veces, nos miramos demasiado a nosotros mismos; creemos que lo que pensamos, nuestras ideas son las más verdaderas; que nuestra religión es la única; que nadie hace las cosas como uno mismo; que no necesitamos de los demás y a veces ni siquiera de Dios; que no somos como otros con innumerables debilidades y fallos; alardeamos de lo que tenemos sin mirar a nuestro lado para ver lo que les falta a los demás; nos creemos “super cristianos” por ir a misa, rezar y hablar muchísimo de religión pero a veces poco nos importan las situaciones difíciles de los otros, (recordaba por ejemplo el caso ese del obispo alemán= “el obispo de lujo”) que ha gastado millones de euros en una casa con dinero que no era de él. Una manera de pensar en sí mismo con un corazón de rico.
Y por el contrario también hemos vivido lo bonito de esas experiencias de acercarnos a Dios para pedir perdón por nuestros fallos, para decir “lo siento” de una manera sencilla y humilde, para pedir fuerza y ánimo en momentos duros, para agradecer el regalo de cada día. Y si esa actitud es la que tenemos ante Dios, es seguro que será también la que tenemos con los demás, contando con ellos; importándonos lo que les pasa; haciéndonos cercanos; comprometiéndonos en situaciones difíciles pero justas; invirtiendo tiempo y amor en los demás.

Ojalá tú, yo, nuestro grupo, nuestra comunidad, después de mirarnos y de reflexionar, elijamos y trabajemos por poner humildad y sencillez en nuestra vida, que esa sea nuestra forma de presentación ante Dios en la oración y en nuestra manera de actuar  ante los demás. Juntos caminaremos hacia una sociedad un poco más justa y humana.
R.A.

 

domingo, 20 de octubre de 2013

EL PODER DE LA ORACION (Lc 18, 1-8)

Los personajes que presenta Lucas, son el vivo reflejo de lo que sucede en esta vida hoy. Un montón de viudas, de parados, de estafados, de gente sin recursos.... está pidiendo a gritos que se les ayude y es que vivimos a hora mismo en una sociedad en la que necesitamos eso, AYUDA!!! y es que las injusticias pasan por nuestra mirada cientos de veces al día.

Pero no solo vale ir una vez y al primer NO desfallecer, yo mismo uno de los afectados por las clausulas suelo de este país, he tenido que insistir durante más de 6 meses que me la quiten por varios medios y al final...... lo he conseguido, me dan igual los motivos pero lo he conseguido.

Esto nos enseña que hay que luchar por lo que es nuestro, por lo que consideramos justo, hay que tener fe y saber esperar, Jesús no nos va dejar solos.

Párate en cualquier sitio de tu caminar diario, piensa y reflexiona que necesitas o necesitan los que te rodean y pídeselo a Dios, no te canses, el sabrá cuando dártelo o hará pasar el tiempo para que quizás veas y te des cuenta que no era necesario lo que pedias en su día por que te ha alguna cosa mejor.

A mí me cuesta lo sé, seguro que a ti también, pero........ Como dice el refrán: el que algo quiere algo le cuesta, así que habla con Dios como cuando de pequeño le pedias algo a tus padres hasta cansarles.

domingo, 13 de octubre de 2013

HE VUELTO............

Han pasado justo 5 meses desde que decidí dejar de comentar el evangelio de los Domingos.

Cinco meses sintiendo la necesidad de hacerlo por la sensación que tenia una vez había unido mi vida con mi fe y lo había compartido con todos vosotros.

No he pensado mucho en cómo sería mi vuelta pero si tenia claro que tenia que tener el tiempo, las ganas, el silencio y la paz que requiere hacerlo bien. También deseaba tener una red de compañeros laicos que en caso de no poder disponer de esos 4 pilares pudieran ellos unir y compartir con todos vosotros su vida y su fe.

A partir de aquí lo que salga podréis o no leerlo pero estoy seguro que a mi me hará sentir algo especial al terminar de compartidlo con vosotros.

Gracias a todos los que seguís visitando el blog, ya son casi 7000 visitas.

Bienvenidos de nuevo, amigos.

domingo, 12 de mayo de 2013

UNA TAREA, UN COMPROMISO, UNA MISIÓN (Lc 24,46-53)

Nos encontramos ante los últimos momentos de Jesús junto a sus amigos.

Desaparece de la vista de los discípulos bendiciéndolos y ellos vuelven a Jerusalén llenos de alegría, con una tarea, un compromiso, una misión.

Vivirán un tiempo nuevo, serán testigos de las palabras y los gestos de Jesús con confianza y esperanza: Jesús les había prometido su presencia continuada y nunca se encontrarán solos.

Hoy, esa llamada es a mí, a ti y a todos los que de alguna manera notamos que Jesús nos habla y nos envía, nos pide que bajemos los ojos, que miremos y veamos los caminos de la vida, que nos preocupemos por esa gente angustiada y sin recursos y que trabajemos por la justicia y el bien común. 

El lema de este curso en nuestra Unidad Pastoral es: “Alumbrando Caminos Samaritanos / Bideak Errukiz Argituz” y hoy juntos celebramos el “Domingo Comunitario”.

Dentro de la comunidad intentamos: crear, dar a luz caminos nuevos desde ese sentir compasivo a la vez que ponemos chisipitas de luz para iluminar en este tiempo de oscuridad.

Esta es nuestra tarea, nuestro compromiso y nuestra misión de este curso.
 
R.A.

domingo, 5 de mayo de 2013

PAZ Y AMOR (Jn 14, 23-29)

“El que me ama guardará mi palabra, y mi Padre lo amará, y vendremos a él y haremos morada en él”
 
Dios nos quiere como un padre (o madre), y ¿qué significa esto? Es fácil sentir el amor de un padre o una madre, que velan por ti desde el primer segundo de tu existencia. Pero yo no descubrí el significado exacto de estas palabras hasta hace once años que fui madre. Entonces descubrí una nueva forma de amar. Un amor incondicional, sin esperar nada a cambio, amar por encima de todo. Un AMOR infinito. 

Pero Jesús va más allá, nos dice que hagamos caso a sus palabras, que no nos quedemos pasivos, sin hacer nada con el amor de Dios, sino que salgamos de nuestro caparazón y amemos con nuestras acciones allí donde vayamos. De esta forma descubriremos que no hay cosa más gratificante, y sentiremos a Dios dentro de nosotros.

«Mi paz os doy.» «No os la doy como os la da el mundo.»

Jesús nos anuncia que se va, que no estemos tristes y nos deja su paz. Nos deja un poco así, pero ¿Cuál es esa paz? Es darse cuenta de que vale la pena cualquier esfuerzo si se hace por amor. Su paz consiste en buscar la felicidad en el amor, que es darse, y no en el egoísmo, que es buscarse a sí mismo. Uno debe abandonar su comodidad e incluso su voluntad para hacer la voluntad de Dios.

Yo como madre intento hacer ver a mis hijos que sacrificarse por los demás tiene mayor recompensa y más duradera que hacer lo que a uno le apetece en ese momento aunque tengamos pereza. Y no hay mayor sacrificio que ser madre… pero a su vez la MAYOR SATISFACION.

Felicidades a todas las madres!!!
A.A


domingo, 28 de abril de 2013

LA RECETA DE JESÚS (Jn 13, 31-35)

El Evangelio de hoy no nos lo puede decir mas claro, amaos los unos a los otros como yo os he amado.
 
Nos esta estimulando, pidiendo compromiso y diciendo que vivamos de una forma diferente, que no se trata solo de parecer que somos cristianos, si no de serlo y de serlo como me decían a mi de joven las 24 horas del día, que la gente que te rodea, note de verdad que eres diferente, por ese AMOR y por ese SERVICIO que das a los demás.
 
Pero como toda gran receta tiene sus ingredientes secretos, yo me atrevo a desvelaros la receta con los ingredientes secretos de este amor especial que nos pide Jesús, especial por que dice como yo os he amado.
 
"Cogemos el amor de un cristiano cualquiera y lo mezclamos con generosidad, gratuidad y humildad, una vez realizada la mezcla echamos un chorrito de espera, comprensión, escucha y sencillez, con todo esto nos tiene que salir una masa tierna y si los ingredientes los echamos en cantidades industriales nos llegará para repartir no solo a los mas cercanos (a los que mas quiero) si no también a los mas lejanos, (a los que de momento no conozco)."
 
La pena que es una receta difícil de realizar y nosotros todavía no somos grandes chefs, pero yo os animo a realizarla, con el tiempo seguro que nos saldrá perfecta y cada uno le añadirá un ultimo ingrediente como toque personal.




domingo, 21 de abril de 2013

ESCUCHA MI VOZ (Jn 10,27-30)

“Mis ovejas escuchas mi voz y yo las conozco”… Es la frase que resuena en mi cabeza de este evangelio, especialmente “Yo las conozco”. Las ovejas son muchas pero Él las reconoce, las trata individualmente, ha fijado sus ojos en todas y en cada una de ellas.

Me es inevitable compararme, soy tan despistado que en muchas ocasiones no recuerdo los nombres de algunas personas o incluso en ocasiones no soy capaz de reconocer todas las caras de las personas que han pasado por mi vida, compañeros del instituto, de trabajo etc… No me creo único, sé que no soy la única persona a la que le sucede esto, pero es un signo que me indica que aún me falta mucho recorrido y discipulado para convertir a los demás en el centro de mi ser y cumplir sus palabras “amaos unos a otros como yo os he amado”.

Por la vida de Jesús han pasado millones de personas y Él tiene ojos, memoria, tiempo, palabras, amor para todas ellas. Y siento que me pide que tenga su misma disponibilidad, yo y todos nosotros. Que nos acerquemos al prójimo, sufra o no, sea conocido, amigo, hermano o no, y que nos impliquemos con él / ella. Nos interpela a que destinemos un tiempo, unas palabras, un gesto etc, a desprendernos y dedicar algo que nazca desde lo más hondo de nuestro ser para acogerlas, ayudarlas, vivir con ellas, interesarnos por sus problemas y en definitiva crear un mundo más fraterno. Priorizar a los demás para realmente seguir a Jesús y “dar vida eterna” como dice el evangelio de hoy. Si los cristianos nos abrimos al mundo y “vemos” a cada persona como un ser único, especial y valioso haremos que este mundos sea realmente ese Reino de Dios y dónde nadie podrá arrebatar a nadie de las manos del Padre, porque todos seremos amados y cuidados por una Comunidad acogedora, auxiliadora y potenciadora de todas las capacidades de las personas.

R.G.

domingo, 14 de abril de 2013

¿ME AMAS? (Jn 21, 1-19)

La semana pasada necesitábamos creer para ver, pero yo os digo que esta semana necesitamos amar para ver a Jesús, por que cuando uno está lleno de amor, se mira de otra manera, se habla de otra manera, se siente de otra manera.

¿Cuantas noches nos hemos ido a la cama sin encontrar solución a nuestros problemas? y al amanecer como a los pescadores, no sabemos por que pero tenemos la solución. Pensar un poco…. Por que magia no es

Yo ahora mismo estoy en desempleo como millones de personas y que casualidad que Jesús en este evangelio se presenta cuando están trabajando, como un compañero mas, pero el momento no es de felicidad si no todo lo contrario ya que han estado toda la noche trabajando y no han pescado nada, por eso cuando vemos que todo es difícil, que no hay salida, sentimos que hemos fracasado, alguien se acerca por casualidad y todo cambia.

Llevo como 9 meses en desempleo y creo que ese alguien a sido este evangelio que ha llegado hoy a mi vida y que me dice que busque trabajo de otra forma, (que eche las redes en otro sitio)

Por otro lado, ¿que trabajo desempeño como cristiano? Jesús nos pregunta muchas veces como a Pedro si le amamos y nos pide fruto sea grande o pequeño, que importa. Puede ser una escucha atenta, una sonrisa, un apoyo, un compromiso…..

domingo, 7 de abril de 2013

CREER PARA VER (Jn 20,19-31)

Nuestra fe, igual que muchas cosas en la vida, necesita certezas: “ver para creer”. Nosotros, igual que Tomás necesitamos “ver y tocar” para estar seguros.

Pero también sabemos y hemos experimentado que las cosas más importantes (el amor, la alegría…) sólo se ven con el corazón y que “lo esencial es invisible a los ojos”.

Vieron al Señor rápidamente aquéllos que sentían un amor apasionado por Él como las mujeres porque nunca dejaron que desapareciera de su corazón.

El secreto está en hacerle un sitio en nuestra vida, en sentirle, en quererle y así llenarnos de paz, de alegría y de esperanza como los primeros testigos de la Resurrección.

Jesús los envió con la fuerza del Espíritu Santo. Así nació una nueva comunidad de hombres y mujeres valientes, confiados y esperanzados, capaces de hacer las cosas de otra manera, con esa paz que hace posible un mundo nuevo y con la alegría y confianza de verse acompañados.

Hoy esa comunidad es la nuestra y nosotros somos los testigos enviados.

¿Decimos si no lo veo no lo creo ó creemos, tenemos confianza y sentimos a Dios en nuestro día a día?

¿Somos una comunidad que camina bajo la influencia y la fuerza del Espíritu Santo?

¿Contagiamos alegría y paz en nuestro caminar?

¿Abrimos caminos samaritanos?                               

Ojalá esa presencia de Dios nos haga cada día más valientes, menos egoístas, capaces de compartir, de ser compasivos, de apoyar al más débil y de ser esperanza para los que sufren.
 
R.A.

domingo, 17 de marzo de 2013

VETE Y NO VUELVAS A PECAR (Jn 8,1-11)

Me gusta este evangelio porque me toca de cerca en el día a día. Es fácil juzgar a los demás, de hecho nos sale sin pensar. En cambio nos resulta muy complicado ver nuestros fallos, y mucho más, en el siglo XXI, asumir nuestra culpa. Vivimos en una sociedad en la que buscamos excusas de nuestros actos, evitando la responsabilidad. Nadie asume su culpa. En cambio juzgar nos resulta muy fácil.

Jesús nos da una lección increíble, nos dice ¿quién eres tú para juzgar? Ponte en el lugar del prójimo. ¿Tú nunca te equivocas? Aprende a perdonar y da una oportunidad porque alguien te la ha dado ti. 

Pero va más allá, “vete y no vuelvas a pecar”, sigue adelante que Dios te da una oportunidad. Aprende de tus errores y mira al futuro con esperanza y felicidad. Porque te has equivocado, has aprendido una lección y has reconocido tu culpa. Este proceso te ha hecho mejor persona.

Hoy piensa en el evangelio antes de hablar y de juzgar a alguien, ponte en su lugar, seguro que has vivido una situación parecida. Déjale levantarse y seguir su camino, porque Dios le ha perdonado y le anima a seguir.

domingo, 3 de marzo de 2013

SEGUNDAS OPORTUNIDADES (Lc 13, 1-9)

Esta evangelio me pone triste, me hace pensar y reflexionar que clase de cristiano soy, ¿tengo paciencia? ¿doy segundas oportunidades? ¿Doy frutos? y si los doy ¿que clase de frutos? 

En el evangelio de hoy Jesús nos quiere dar una nueva oportunidad, quiere frutos de nosotros. Todos los días como le sucedía a Jesús nos llegan malas noticias a nuestras vidas, unas lejanas y otras cercanas, y... ¿que hacemos nosotros? Podemos pensar, ¿como es posible que Jesús permita estas cosas? (yo lo he pensado muchas veces en mi vida) o por el contrario preguntarme que puedo hacer yo para que eso no pase, quizás nos sea difícil averiguar la respuesta a la segunda pregunta, pero seguro que podemos dar con ella y empezar a dar frutos.

Yo, nosotros, vosotros, somos cristianos, somos diferentes en esta sociedad y se tiene que notar, no vale con ir a misa todos los Domingos,(que por cierto yo no voy mucho) ¿que fruto podemos dar dentro del templo? mas bien podemos ser una higuera seca.

Nuestra misión esta fuera, que nos de el sol, nos empapemos y así poder dar frutos, no hace falta irse lejos a otros países, podemos ser misioneros aquí en mi ciudad, mi trabajo, mi comunidad, mi familia... tal vez sea una misión sencilla o pequeña pero seguro hará que broten frutos.

Mi misión debe comenzar hoy, para que pronto broten los frutos.

domingo, 24 de febrero de 2013

DESPIERTA A LA VIDA (Lc 9, 28-36)

Hoy me levanto temprano a escribir este comentario y un paisaje totalmente nevado hace que la luz que entra por la ventana sea mas fuerte de lo normal a mis hijos les molesta y yo aun estando medio dormido de repente veo con claridad lo que me dice este evangelio, que raro........
 
Este evangelio nos habla de la importancia que es la oración, pero no una oración de pedir y pedir como si fuera un monologo, si no una oración que escuchando/siguiendo a Jesús nos transforme.
 
Yo soy de los que digo que cuando hago oración comunitaria, salgo diferente, raro, distinto, como si hubiera vivido una experiencia de transformación.
 
Nuestra vida, va a tener momentos de pasión, sufrimiento, de dolor, muerte..... Pueden ser situaciones personales, enfermedades, problemas de trabajo, problemas económicos.... En estos momentos cuando todo lo vemos negro, abramos bien los ojos, alcemos la vista y veamos a Jesús en esa luz que brilla seguramente hará que todo lo que nos pasa se transforme en alegría para nuestra. vida
 
Tengo recientemente en la retina un piso de acogida a inmigrantes y una casa de ayuda a personas que en la vida todo lo veían negro y que gracias a personas que son luz en esta sociedad puede ver como su vida se va transformando.

domingo, 17 de febrero de 2013

POR EL DESIERTO = POR LA VIDA (Lc 4, 1-13)

Hace algo menos de 2 años comentaba este trocito de evangelio en http://santamariadeolarizu.blogspot.com.es/2011/03/las-tentaciones-intenta-decir-no-mt-4-1.html y algo ha cambiado, algo en mi vida y en la vida de los que leéis estos comentarios estoy seguro que ha cambiado.

Pero hay cosas que no cambian, las TENTACIONES, la vida es un viaje por el desierto, en el que las tentaciones están ahí día a día y no nos dejan en paz.
 
Yo como cristiano intento vivir una vida diferente, intento decir NO a las tentaciones, pero...... ¿es eso posible? ¿Tengo la suficiente fe como Jesús para salir airoso de todas ellas? Pues desde estas lineas os digo que NO, no soy capaz.
 
En estos tiempos que vivimos, donde no solo se vive de pan, donde millones de hogares ya no tiene para comer, donde el poder que nos gobierna solo piensa en tener y tener, no en hacernos la vida un poco mas feliz, donde la gente se tira desde sus YA NO VIVIENDAS, esperando que si no una ángel al menos este hecho en sus vidas sirva para que millones de personas no tengan que tirarse al vacío desesperados, no me digáis que no es fácil caer en la mas mínima tentación que se nos ofrezca, entonces por que Jesús pudo decir NO, ¿al menos su vida era mas fácil?
 
Recuerdo en estos momentos vidas semirotas de amig@s, que lo han pasado mal en estos 2 años y lo están pasando mal en estos momentos, pero me alegra saber y escucharles que gracias a su fe siguen hacia delante con un estilo de vida diferente a lo que se nos esta ofreciendo.

Lo que tenga que pasar pasará, pero seguro que Jesús quiere lo mejor para nosotros.

lunes, 4 de febrero de 2013

¿SORDO O SIN PROFETA? (Lc 4, 21-30)

Siempre que hago una lectura de este evangelio resuena en mi cabeza un pequeño dicho muy conocido “la confianza da asco”, parece que por el exceso de familiaridad es por lo que no somos capaces de reconocer la grandeza de aquello que tenemos más cerca. Esta es siempre mi primera lectura del Evangelio, aunque me temo…muy equivocada.
Pero antes aportemos el contexto. El evangelio del domingo pasado tenía como escenario el mismo que el del presente; la Sinagoga de Nazareth. Los vecinos del pueblo conocían a Jesús, lo habían oído hablar en ese espacio muchas veces. Pero tras unos meses de ausencia, su vecino regresa. Los rumores y comentario le preceden. Como en otras ocasiones Jesús acude a la reunión del Sabbat y confirma lo que muchos han oído; Soy el Mesías. Pero precisamente porque lo conocían les asaltan las dudas y los reproches. ¿Por qué tras vivir 30 años con nosotros no lo sabíamos? ¿Por qué no ha realizado curaciones aqui con sus paisanos? ¿Por qué hay gente que ha muerto, sufrido etc puerta con puerta del Mesias sin que haya hecho nada?
La respuesta de Jesús es; Nadie es profeta en su tierra. Esto es, precisamente por la familiaridad, por el trato diario no fueron capaces de reconocerle, de entenderle, de apreciar lo que decía, vivía y sentía. Y un reproche implícito… el pueblo al que se le han dado todas las señales, todos los mensajes y que se supone pronto a la espera, es el que es incapaz de estar atento y despierto en la llegada del Mesías. Habrá otro pueblo, el de los gentiles, que si lo reciba. (El evangelista Lucas escribe especialmente para los cristianos de tradición gentil o pagana)
Occidente en estos momentos es el pueblo de Nazareth. Estamos a la espera de alguien o algo que no sabemos verbalizar (líderes políticos, sistema económico sostenible, felicidad etc…) y nos sentimos huérfanos de profetas y de guías. La Iglesia en muchas ocasiones también está en esta misma situación; “cubrir” vacantes de líderes espirituales es en nuestros días como un mero formalismo, nadie sabe quiénes son, que carismas tienen, que trabajo desempeñan… y sobretodo los sienten, los siento, como lideres lejanos o profetas sin voz. Hoy este comentario queda abierto…. ¿Han llegado mis profetas, guías y “mesías” y estoy sordo? ¿o la comunidad cristiana esta moribunda, cansada y desorientada por ausencia de verdaderos líderes y profetas?. Si alguien se siente como yo, que me ayude a escuchar al Espíritu en este evangelio. No quiero enfurecerme y empujar hasta barrancos para finalizar, como en este relajo, con Jesús alejándose de mi
R.G

domingo, 20 de enero de 2013

UNA RELIGIÓN DE VIDA (Jn 2,1-11)

En el Evangelio de hoy, en un pueblo humilde y poco conocido (Caná) y en una fiesta de amor y felicidad (una boda) Jesús convierte el agua en vino. Con este signo nos propone un cambio: sustituir la ley y los ritos por una nueva manera de vivir: “en amor y con alegría”.

Pasar de una religión fría, de normas y de leyes a una de vida, de fiesta y de compromiso vivo. Pasar de la ley al amor, de lo mandado a la compasión creativa, de lo seguro al riesgo.

Muchas veces decimos que es difícil, que nos cuesta captar la presencia de Dios en los acontecimientos de cada día, que tenemos que estar más atentos, con más confianza en Él, escuchar y estar dispuestos a actuar.
Tenemos que  mirar alrededor para darnos cuenta de que “no tienen vino”..., para no vivir “sin enterarnos de la fiesta”..., para sentir que algo falta y falla… “No tienen vino”, ni trabajo, ni casa, no tienen techo ni derechos…
Mirar a nuestro lado para poder actuar conforme a lo que Jesús-Dios quiere: “Haced lo que él os diga”.

Igual que la fe de los discípulos empezó a crecer al ver  los signos de Jesús, nuestra fe despertará cuando seamos capaces de descubrir a Dios y lo que nos quiere decir,  mirando con atención, con otros ojos, y aportando a los demás esperanza, alegría y amor.

Mirar a la realidad con otros ojos para hacer lo que Él nos dice”.
R.A.

domingo, 13 de enero de 2013

HUMILDAD (Lc 3, 15-16.21-22)

Tan poco acostumbrados estamos a verlo que no puede más que sorprendernos de este relato el testimonio del servicio a través de la humildad que aparece en él.

La humildad de Juan que, ante los rumores que corrían y la consideración de la gente, no duda en aclararles que él “sólo” los bautiza con agua, pero que todo el cambio que la gente espera no vendrá con él ni Juan tendrá apenas nada que ver con ello.

La humildad de Jesús. Podría no haber esperado y recibido el bautismo, (total, es Dios y no le hace falta....). Podría haberse saltado la cola; tenía que comenzar su labor y no tenía mucho tiempo...Podría incluso haberse manifestado como quien era y haber sustituido a Juan en ese momento...

Pero no hizo nada de eso, sino que esperó en la cola su turno como uno más, y recibió el  bautismo de manos de un hombre como otros. Y, finalmente, todo quedó en su sitio, pero ninguno de ellos reivindicó nada...

Parece realmente extraño y, desde luego, no ocurre lo mismo habitualmente, en la política, ni en el mundo laboral, o incluso en la famila, ni, muchas veces, desgraciadamente, al realizar nuestra labor en nuestras comunidades cristianas. A diario, en los medios de comunicación, en nuestras relaciones personales...incluso, en nuestras propias actitudes podemos ver ejemplos de lo contrario. Reclamar lo que uno hace (o, incluso, peor aún, lo que realmente no se hace) y ponerse medallas parece ser la norma.

También muchas veces nos puede parecer vergonzoso que en algún momento nos tengan que ayudar, y, depende de la situación, nos puede llegar a herir en el orgullo.

Es de justicia que a cada uno se nos reconozca lo que hemos realizado o contribuido...pero tanto Juan como Jesús nos muestran que empeñarse en exigirlo (y entrar en discusiones estériles con argumentos del tipo “Yo he hecho.. y....y.” ) no es el camino, se nos iría la fuerza por la boca. El mismo orgullo nos puede conducir a rechazar en alguna ocasión que nos intenten ayudar (aunque lo necesitemos).

En definitiva podemos reconocer aquí una llamada a no preocuparnos por todo ello, y a servir desde la humildad, cada uno en lo que buenamente pueda y, recibir, desde la humildad, lo que con amor se nos ofrece.
S.F.

domingo, 6 de enero de 2013

YA VIENEN LOS REYES (Mt 2, 1-12)

En esta noche mágica de reyes y después de acostar a los pequeños con esa ilusión que les envuelve me pongo a leer el evangelio de la Epifanía del Señor y me conmueve y me cuestiona,  pienso en la mirada de esos niños que al levantarse hoy vivirán momentos mágicos y de ilusión, pero también quiero recordar a otros rostros, otros niños que tal vez no tengan hoy nada para comer, no tengan fuerzas para reír porque están malitos.

Hoy es un día de alegría en todas las casas, sobre todo en las que hay niños. Abren emocionados sus regalos, esperando con ilusión eso que pidieron en la carta a los Reyes Magos, incluso Jesús después de nacer y llenar de alegría a sus padres, también recibió sus regalos.

A todos los niños del mundo sirva hoy mi adoración y mi abrazo lleno de ternura como el que los reyes de oriente llevaron al mesías...
N.B.

martes, 1 de enero de 2013

JUNTO AL PESEBRE ( Lc 2, 16-21)

Mucho se puede hablar de este texto, de las actitudes de María, de José; de los pastores, del significado del anuncio etc…
Pero en esta ocasión si me lo permitís, quisiera impelentemente destacar una pequeña frase, anecdótica, sin significado pastoral ni teológico; Fueron rápidamente y encontraron a María, a José, y al recién nacido […] contaron lo que habían oído […] y todos los que los escuchaban
Por ubicar a los que no hayan leído el evangelio, los pastores acuden corriendo al portal, encuentran a la Sagrada Familia  y cuentan el anuncio del ángel… pero el evangelio continua “y todos los que escuchaban”. ¿Había mas personas que la familia y los pastores?. Parece que si.
El pesebre, portal, establo, cabaña o cueva (que cada cual tome la tradición que más le guste) es lugar de encuentro y de acogida.
Olvidémonos de anuncios mesiánicos… las personas de Belén o Nazaret (De nuevo que cada cual escoja por tradición o por historicidad) se congregan en torno a un recién nacido. Posiblemente a conocer al hijo de “José” y María,  a contribuir con una pequeña ayuda, una palabra o simplemente para dar  compañía en una suave noche. El pesebre es como el hogar, el Niño es el fuego que da calor y en torno al cual  la humanidad  se congrega para compartir unos instantes de su vida con vecinos, con unos forasteros, con una madre primeriza, con un niño que hace las delicias de todos. Un lugar tan agradable en el que permanecemos y contamos historias, misteriosos anuncios de buenas nuevas, palabras importantes que orienten nuestras vidas, pero también las pequeñas vivencias del día, insustanciales palabras sobre la meteorología, chistes y anécdotas. Gentes entorno a un niño siendo acogidos y acogedores a un mismo tiempo, compartiendo su vida y queriendo al prójimo.
Esta noche del 31 de diciembre, todos hemos hecho lo mismo, nos hemos reunido en torno a una mesa, a una televisión, a un reloj, a una pista de baile… con buenos propósitos, con palabras alegres, incluyendo en  nuestras buenas noticias, en el anuncio de un feliz año nuevo a  todo aquel que quisiese sumar alegría y recibirla también. Cierto es que es algo efímero, un gozo fugaz e incluso en algunos casos desmedido e infructuoso; pero en el interior de todos nosotros, es nuestra mas íntima profundidad…hay una llama, un ascua del fuego de ese pesebre. Alimentémoslo para que todos los días acudamos junto a esa cueva, cabaña, portal  o establo, acogiendo y siendo acogidos, recibiendo y dando amor a familiares, amigos, conocidos pero también a forasteros, a recién nacidos, a pastores con mensajes y anuncios. Convirtamos nuestras casas, nuestros trabajos, nuestras parroquias etc… en lugares  amables para todas las personas, donde puedan encontrar reposo y una persona amiga que sea “calor” emanado del pesebre en el que nació un niño, y que fue centro de una noche de hermandad y unión de todo aquel que anduvo cerca en una suave  noche de invierno de hace 2013 años.
R.G